PLANTA DEL TABACO ES UTILIZADA PARA CREAR POSIBLE VACUNA CONTRA COVID-19
La carrera por encontrar una vacuna contra el nuevo coronavirus tiene un nuevo participante: una planta del tabaco de nombre Nicotiana benthamiana.
Los científicos de todo el mundo han estado buscando soluciones en todos los lugares posibles, ya sea en tecnología de punta que puede modificar genes o una antigua planta del tabaco que pueda actuar como una biofábrica de moléculas de drogas.
¿DE QUÉ SE TRATA SU USO Y ESTUDIO?
El profesor Peter Waterhouse del Laboratorio de Genética Molecular (LMG) de la Universidad Tecnológica de Queensland (QUT), trabaja con una planta nativa de Australia que muestra potencial en la lucha contra el SARS-CoV-2.
Esta planta de tabaco, Nicotiana benthamiana, produce anticuerpos (inusual en las plantas) y, por lo tanto, ofrece potencial como biofábrica para la producción de nuevas vacunas contra el coronavirus.
El profesor Waterhouse, explica que los expertos en biotecnología están trabajando para descifrar las secuencias genómicas de la planta nativa para explorar su acción contra el virus.
Sars-CoV-2 es el virus que causa la enfermedad Covid-19. Hay al menos 20 vacunas en desarrollo en todo el mundo.
¿QUÉ ES LA NICOTIANA BENTHAMIANA ?
La planta pertenece a la familia de las plantas de tabaco y se conoce comúnmente como «Benth» en los laboratorios.
Es una planta de tabaco nativa que ha sido utilizada durante siglos por los australianos indígenas. Crece en el norte y centro de Australia. Las pruebas han demostrado que la planta puede prevenir enfermedades y daños a las plantas debido al cambio climático.
La mención de esta planta fue registrada por primera vez por un cirujano a bordo del HMS Beagle, que también llevaba a Charles Darwin. En la tercera expedición del barco a Australia en 1936, Sir John Cleland descubrió la planta y sus semillas en Australia Central.
Desde entonces, muchos investigadores han trabajado con Benth en laboratorios de todo el mundo. El genoma de la planta tiene alrededor de 60 mil genes, y esto es el doble de lo que tiene una planta común, dicen los investigadores. Esto hace que su genoma sea único, explican.
El profesor Waterhouse dijo: “Es una planta especial porque se está utilizando para un amplio espectro de vacunas y anticuerpos, incluidos los del Ébola y ahora para el COVID-19. Las plantas no suelen producir anticuerpos; es algo que hacen los animales «.
Momento de hacer investigar
Lo que harían los biotecnólogos sería inyectar o infiltrar en la hoja de la Nicotiana benthamiana las instrucciones del ADN sobre cómo fabricar el anticuerpo o la vacuna contra la COVID-19 y la planta produciría la vacuna en sus células.