Secretos de San Antonio Hool, una de las haciendas más hermosas de Yucatán
Con pérdidas de 90% en 2020, el sector turístico ha ido entretejiendo estrategias y parámetros cada vez más exquisitos para darle un nuevo sentido a la exclusividad y el lujo, conceptos que, sin duda, después de más de un año de pandemia han adquirido un nuevo significado. Generar experiencias y ofrecer alojamientos cada vez más especiales son las grandes tendencias que la industria ha adoptado para salir avante de la emergencia por COVID-19.
Rosannette Díaz, directora general de la Hacienda San Antonio Hool, en Mérida, Yucatán, dirige este espacio que data del siglo XVII, el cual ha sido restaurado con el fin de redefinir las estancias de lujo a través de cientos de años de historia, arquitectura y atención al detalle.
¿Queé ofrece San Antonio Hool?
Son cuatro hectáreas de propiedad que sólo albergan ocho habitaciones. Es un lugar en el que tal cual puedes transportarte a los mejores años de las grandes haciendas yucatecas. Cada uno de los cuartos son distintos; tenemos cuatro en el área de capilla, que es un espacio hermosísimo con jardines privados y alberca. Y en las caballerizas tenemos otras cuatro suites.
A diferencia de un hotel, nosotros damos el servicio de la renta de la propiedad, sólo damos la hacienda si se ocupan al menos cuatro habitaciones, y la gran experiencia es convertirte, durante tu estadía, en hacendado.
Es el lugar ideal para mantener la sana distancia y manejar todos los protocolos de sanidad.
¿Cómo fue el proceso de restauración?
Ha sido maravilloso, porque hemos estado rodeados de gente muy profesional; la firma de arquitectos es Reyes Ríos Larrán, que es de Salvador Reyes y Josefina Larrán, quienes son artistas y restauradores muy reconocidos, ellos conocen muy bien la historia de Yucatán, de sus haciendas. El objetivo principal fue volver a darle vida a esta propiedad histo´rica respetando todos sus elementos.
Es una hacienda que está catalogada como Patrimonio Cultural de Mérida, ya que se recuperó tal cual como era antes y, a partir de ello, se desarrolló el interiorismo. No se destruyoó ni un muro. Se hizo un estudio histo´rico de la propiedad, vino una historiadora para ver los registros y saber desde cuándo data la hacienda, hasta ver los frescos y pisos. Incluso estamos armando un libro para contar todos los detalles de este lugar.
Tambie´n tenemos jardines en los que hay mucha vegetación y en los que buscamos recuperar especies en peligro de extincio´n de la regio´n, como el guano. La propiedad es un oasis en medio de la ciudad de Mérida.
Una experiencia inolvidable…
Nuestro objetivo es que los huéspedes vivan una estadía única, para ello personalizamos toda su estancia, organizamos cenas privadas con chefs, paseos por la ciudad, damos clases de mixología, de cocina típica, alentamos a que nuestros visitantes realicen turismo de aventura y se hagan conscientes de la importancia de convivir con responsabilidad en tiempos pande´micos.
(Vía: El Heraldo de México)