Lo normal cuando te dicen que vas a trabajar con Leonardo DiCaprio es que te mueras de los nervios antes de conocerle. ¿Pero y él, que estrellas le hacen temblar con su presencia? Pues alguien que nadie habría imaginado: Luke Perry.
Ambos actores coincidieron hace varios meses en el rodaje de Érase una vez en Hollywood, la nueva película de Quentin Tarantino en la que Perry participó semanas antes de su fallecimiento. Un trabajo breve pero intenso que marcó mucho a sus compañeros hasta el punto de que Leonardo quiso dedicar unas palabras en su honor durante el estreno anoche en Los Ángeles del filme.
“Luke Perry era el ser humano más amable y dulce que te puedes encontrar”, afirmó. “Yo crecí viéndole en Sensación de vivir, creyendo que era literalmente el tío más guay del mundo. Y honestamente, cuando vino al plató y me lo presentaron no podía creerme que estuviera diciéndola hola”, explicó.