10 cosas que puedes hacer en Acapulco y no sabías que existían
Acapulco ya es más que sol y playa. La llamada Perla del Pacífico poco a poco va ofreciendo nuevas experiencias tanto en el agua como en el aire y de tipo cultural. Para tus vacaciones de verano, en Destinos te recomendamos10 actividades diferentes en este clásico destino de la costa de Guerrero.
Foto: Fideicomiso para la Promoción Turística de Acapulco.
1. Deslízate en la tirolesa más larga del mundo sobre el mar
Foto: Cortesía XTASEA.
A 100 metros de altura, en la bahía de Puerto Marqués,el parque Xtasea presume de tener la tirolesa más larga del mundo sobre el mar. Durante dos minutos sentirás un shot de adrenalina, pues recorrerás 1.8 kilómetros de longitud a una velocidad de 120 kilómetros por hora. Para una experiencia más emocionante, sentir una mayor velocidad y el viento en la cara, los participantes se colocan en’ posición de Supermán’.
Las vistas son increíbles al contemplar la bahía y ese mar inmenso desde las alturas. Te recomendamos lanzarte unos minutos antes de la puesta de sol, cuando la panorámica del cielo y el mar muestra tonalidades más cálidas. El costo del vuelo supermán es de 1,200 pesos por persona, aproximadamente.
La plataforma para lanzarte de la tirolesa parece estar suspendida en el aire. Por cada escalón que subas hacia esta, el corazón se agita más y los nervios aumentan.
En la primera fase, el personal del parque te pesa para calibrar la tirolesa. Luego te ayudan a colocarte un equipo protector que consiste en un casco de seguridad y una especie de chaleco que cubre todo el cuerpo.
Una vez con el equipo de seguridad puesto, ya no hay vuelta atrás. El personal te conecta a un arnés y te piden que te coloques como si fueras a hacer lagartijas. “Disfruta tu vuelo”, dicen, y, en un dos por tres, estarás prácticamente volando sobre el mar. El mismo instructor grita a los cuatro vientos tu peso para que su compañero, el que va a recibirte, esté preparado: “te mando 60 kilos para calibrar”.
2. Elige un alojamiento alternativo: el Jardín Holístico
Foto: Nadia Rodríguez Jiménez
En Acapulco es posible relajarse, estar en contacto con la naturaleza y conectar contigo mismo. El Jardín Secreto Centro Holístico es el nuevo resort muy cerca de la playa Bonfil donde todo esto puede ocurrir. Este espacio envuelto en la vegetación, con palmeras, bambúes de más de dos metros de altura y hermosas orquídeas aromáticas cuenta con varias áreas especiales para pasar un rato ‘chill’.
Este resort es un centro de bienestar y sanación prácticamente escondido. Aquí, tienes la opción de hospedarte en cabañas y villas ecológicas hechas de bambú. Cuentan con camas matrimoniales, adornos de orquídeas y una decoración bohemia. Disfruta de su sala de estar con vista a la naturaleza y del jacuzzi al aire libre.
El Jardín Secreto Centro Holístico imparte clases de yoga, organiza sesiones de meditación y retiros energéticos de fin de semana, en los cuales te llevan a ver el amanecer a la laguna Tres Palos. También te consienten con una ceremonia de cacao o un ritual de fuego, y hasta puedes crear tu propio mándala en uno de sus talleres. En muchas de estas actividades puede participar público en general, aunque no se alojen en este resort.
No puede faltar la ceremonia de temazcal para ‘remover’ las toxinas del cuerpo ni la terapia de sonidos para armonizar tu energía.
Los desayunos en el restaurante Mamma Gaia son saludables y deliciosos, además del café y los shots medicinales.
Contacto: Tel. 744 909 0622. Facebook @JardinSecretoAcapulco
3. Tour en la laguna Tres Palos
Foto: Nadia Rodríguez Jiménez
Ir a Acapulco sin haber visitado la laguna Tres Palos es hacer un viaje incompleto. En la zona sur de Punta Diamante, en los límites de Barra Vieja, hay una laguna de 15 kilómetros de largo y 5.5 kilómetros de ancho en la que se forman canales de agua medianamente profundos.
La laguna está rodeada por manglares y vegetación selvática. De septiembre a noviembre aparece un jardín de flores de loto con las cuales te enseñan a elaborar un collar.
La gente local cuenta que el barro que hay en el fondo de la laguna tiene propiedades purificantes y exfoliantes. Su mascarilla con esta arcilla promete dejarte una piel tersa y radiante. Los guías te ayudan a juntar un poco de barro para que lo apliques en tu cara, lo dejes reposar unos minutos para después enjuagar con el agua la laguna.
En las orillas de Tres Palos viven pescadores. En temporada de pesca, suben a su bote durante las madrugadas para revisar las redes. Muchos de ellos cuentan que, a esas horas, los han llegado a espantar: se escuchan ruidos extraños que no provienen de la naturaleza, los árboles se caen, incluso aseguran que les mueven sus cosas dentro de las lanchas.
La laguna también guarda sorpresas para quienes no nos levantamos tan temprano: durante un paseo se aprecian garzas en pleno vuelo o dándose un baño; los patos negros que provienen de Canadá también se refugian, por temporadas, en Tres Palos. Este recorrido en lancha de una hora tiene un costo aproximado de 250 pesos por persona.
4. Cocodrilario
Foto: Nadia Rodríguez Jiménez.
En Barra Vieja se encuentra el cocodrilario Acutus, una Unidad de Manejo Ambiental (UMA) para la Conservación de Vida Silvestre que se dedica a mejorar la calidad de vida de los cocodrilos acutus, una especie que crece en zonas de río.
El cocodrilario protege a 45 ejemplares. Si tienes suerte, podrás ver al cocodrilo Coqueto —que mide tres metros de largo—, a Godzilla y a Cuasimodo, un cocodrilo que está mal de su columna.
La zona está repleta de árboles de mangle blanco. Los guías te platican sobre la importancia que tiene este árbol que ayuda a templar la temperatura de los ecosistemas. Saul Gutiérrez, representante legar del cocodrilario, cuenta que este inició actividades en 2018 pero que, deesafortunadamente, la pandemia ha frenado su crecimiento.
Hay árboles frutales de plátano y de icaco (fruta con cáscara rosada muy dulce que se parece al algodón); mangos, cocos y tamarindos también abundan en el lugar. También es posible ver tortugas, aves, madrigueras de cangrejos azules y nidos de termitas entre las ramas de los árboles de mangle.
5. Paseo en yate
Foto: Fideicomiso para la Promoción Turística de Acapulco
Para tomar el sol, disfrutar con amigos y apreciar la hermosa bahía de Acapulco un paseo en yate es un imperdible en tus vacaciones. Desde aquí podrás ver lugares icónicos que la serie de Luis Miguel puso en el mapa, como la casa en la que se grabó la serie: la de Roberto Palazuelos, y hasta la mansión en donde se filmó la última temporada de Acapulco Shore.
El recorrido en yate te deja ver delfines nadando en el mar, en total libertad, tortugas marinas y mantarrayas.En los meses de diciembre a marzo se ha registrado el avistamiento de ballenas. Si eres de los que se marea rápido vete preparado, pues el vaivén del yate ha mareado a más de uno
6. Isla la Roqueta: un clásico con snorkeling y paddle board
Foto: Unsplash.
Pasar un día en la isla La Roqueta es estar rodeado de aventuras acuáticas. Está rodeada por corales donde viven un sin fin de peces coloridos, erizos de mar y pulpos bebé. Por esta razón el snorkel es una de las actividades más bonitas que puedes hacer en la famosa Roqueta.
Si lo tuyo es el equilibrio puedes subirte a una tabla y hacer paddle board. Primero tendrás que dominar la técnica para montarla, luego mantener el equilibrio sentado, ayudándote de los brazos para remar. Con esto dominado, intenta pararte para hacer paddle board.
Antiguamente, la Isla Roqueta fue un refugio de piratas, quienes robaban motines de los navíos que llegaban a Acapulco, como parte de la ruta comercial que provenía de China.
7. Kayak
En la playa Caleta rema un kayak. La actividad puede durar tres horas, todo depende de tu condición física y aguante. Los guías te explican la técnica del remado, así como las instrucciones de seguridad.
Luego de este paseo puedes ir a comer a una de las diferentes palapas que hay en la playa. Te recomendamos probar los tamales de pescado y el único e inigualable pescado a la talla, acompáñalos con una cerveza bien fría, un agua de tamarindo o una insuperable Yoli. El postre es siempre bienvenido y una nieve de coco es obligada después de tu vista a la playa.
8. Mural de Diego Rivera
Foto: Fideicomiso para la Promoción Turística de Acapulco.
La Casa de los Vientos fue habitada por Diego Rivera en algún momento de su vida. En el exterior de esta residencia hay un mural elaborado por él mismo, con una extensión de un poco más de 70 metros cuadrados. Esta residencia perteneció a Dolores Olmedo, mecenas del artista. El mural representa a Ehecatlcalli, y los los colores que predominan son turquesa, azul, café, amarillo y rojo.
La obra podrás encontrarla en la zona del Acapulco viejo o tradicional, muy cerca del cerro de la Pinzona, en el fraccionamiento las Playas, calle Diego Rivera, precisamente. Además, en la casa también hay murales en el techo, la terraza y los barandales.
9. Paseo en bicicleta
Foto: Fideicomiso para la Promoción Turística de Acapulco
El Paseo del Pecador es un corredor turístico que abarca la Rotonda de los Hombres, pasa por la playa Honda y termina en unas canchas de basquetbol recientemente remodeladas. Hay tiendas de artesanías para comprar los recuerditos y una amplia oferta gastronómica desde comida típica hasta platillos gourmet.
Pasear en bicicleta por este bulevar es conocer la otra cara de Acapulco, un lugar tranquilo en donde puedes tener caminatas o paseos en bici para apreciar la cultura, la gente y, por supuesto, la joya de la corona: los increíbles atardeceres.
10. Brunch en restaurante La Moda
Foto: Unsplash.
Los domingos son de mimosas y brunch con los amigos. El restaurante La Moda tiene una decoración atemporal con un estilo muy rockero, pues las guitarras eléctricas que adornan sus paredes combinan perfecto con las luces neón y la vibra del lugar. La comida esta riquísima y tiene opciones para todos los gustos.
Su barra de postres ofrece donas, pastelillos y creme brule de frutos rojos. Igual puedes probar alguna pasta al gusto, rollos de sushi, comida mexicana, ensaladas, cortes de carne.
(Vía: El Universal)
