Visita un edén llamado Fiesta Americana Hacienda San Antonio El Puente Cuernavaca
Más de 50 mil metros cuadrados de áreas verdes y arquitectura histórica te esperan en Fiesta Americana Hacienda San Antonio El Puente Cuernavaca. Este hotel, ubicado a solo 15 minutos de La Ciudad de la Eterna Primavera, resulta muy atractivo para disfrutar con la familia, amigos y, en especial, para festejar bodas.
Considerada una de las haciendas mejor restauradas y conservadas, el lugar tiene una oferta muy diversa y, a la vez, complementaria. Por ejemplo, si la visitas un fin de semana con un grupo de amigos, es posible disfrutar del excelente clima de Xochitepec en alguna de las dos grandes albercas que incluye. Puedes refrescarte con su amplia oferta de bebidas y alimentarte con snacks, ceviches y tacos de pescado o arrachera.
Si acudes con tu pareja en un plan más romántico, puedes tener una velada muy íntima al interior de la cava del hotel, la cual incluye una gran variedad de vinos para que selecciones la etiqueta o varietal que más te guste. El ambiente es privado e iluminado a la luz de las velas.
Un complemento ideal para relajarte es acudir al Spa y disfrutar de una atención personalizada en masajes corporales, tratamientos faciales, reflexología, aromaterapia, masajes con piedras calientes, exfoliaciones y pedicura, entre otros.
Las familias pueden disfrutar lo mismo de las albercas que de mesas de ping pong, espacios empastados para jugar fútbol, o un poco de baloncesto, en uno de los varios patios de la hacienda.
Un picnic o una “fogatada” son los pretextos ideales para estar en familia disfrutando de alimentos o bien, de bombones derretidos al calor de la leña que arde.
Turismo Dog Friendly
Si acudes con tu perro, este será bienvenido siempre gracias a su programa Dog Friendly, el cual admite a perros de talla pequeña y mediana con un límite de 2 perros por habitación y un peso total que no exceda los 20 kilogramos.
Durante su estancia y desde su llegada recibirán un kit de bienvenida que incluye: Paliacate de cortesía, camita para usar durante su estancia, plato y bebedero en la habitación, botella de agua de 600 ml y un premio o galleta.
El resto de los alimentos deberás llevarlos tú y siempre podrás pasear con tu mascota con correa, dentro de la transportadora o, en su defecto, puede permanecer en la habitación con el colgador en la puerta de “Mascota en habitación”.
Para asegurar la comodidad y tranquilidad de tu can y la tuya, las habitaciones están diseñadas para ello.
Más que días de vacaciones
Quizá el gran éxito de este hotel Fiesta Americana es su oferta de espacios para bodas. Hay desde jardines para 500 o más invitados, hasta salones con techos “abovedados” y con estética colonial. En el caso de uniones católicas, la Hacienda incluye una capilla consagrada para realizar este tipo de ceremonias religiosas.
Las tardes de los viernes en los jardines es común ver pequeños eventos llamados “rompehielos”, para que las familias de los novios socialicen previamente al “gran día”.
Cabe destacar que el aforo de este lugar es uno de los más amplios de la zona, cuenta con 148 habitaciones, todas decoradas con muebles de madera de aspecto antiguo. Sus techos son altos y decorados con grandes vigas, mientras que sus pisos son de piedra o baldosa.
Un contraste agradable es que esas mismas habitaciones incluyen una Smart TV, conexión a internet inalámbrico de buena velocidad y minibar. Otro detalle interesante es su Biblioteca Hortensia Buenrostro que invita a vivir una tranquila lectura. Es un sitio mágico donde el diseño interior te da una cálida acogida. .
Atractivo gastronómico
El platillo emblemático del Restaurante La Molienda, ubicado en el centro de la Hacienda, es un mole, reinterpretado de manera original por los cocineros del lugar para agregar un toque dulce. Así, al visitar este hotel es casi una obligación probar la “Suprema de pollo en mole de guayaba”.
Este platillo es una propuesta con productos muy regionales como es la guayaba y se compone de pechuga de pollo rellena de queso de cabra, acompañada de arroz y plátano macho. La propuesta gastronómica te sorprenderá porque viene acompañada de un pan de elote. La combinación es una delicia.
En ese mismo restaurante también se sirve la “Crema de habanero”. No pica pero sí conserva un sabor característico de este chile. Se sirve utilizando un pan rústico como plato y tiene un toque muy ligero de crujiente de papa.
La variedad de alimentos y platillos es muy amplia y contempla a los principales platillos típicos mexicanos, como la cecina, las carnitas, el café de olla, hasta las más exquisitas propuestas internacionales. La carta es muy amplia por lo que, si tu estancia es de muchos días, siempre podrás pedir algo diferente para comer.
Recinto en evolución
La Hacienda no deja de sorprender ni a los propios encargados del hotel. En ese sentido, no hace mucho se descubrió, a un costado de la cava, un espacio subterráneo muy grande. Ahí se planea hacer un restaurante de especialidades que se ilumine con las luces de las velas y con una propuesta gourmet.
Asimismo, está en construcción un spa más grande. Se planea que esté abierto al público en un futuro. Con el repunte del turismo, la Hacienda está más viva que nunca, aunque es concurrida, sus cinco hectáreas de extensión hacen posible que todos los huéspedes se sientan cómodos, libres y, sin duda, con ganas de permanecer más tiempo y de regresar muy pronto.
(Vía: El Universal)